El pasado martes 20 de febrero vino al colegio la Fundación Jesús Abandonado para desarrollar el Proyecto Escuela Amiga, coordinado por Pepe Galera. En su visita acudió este trabajador social y un usuario de Jesús Abandonado, llamado “Pencho”, el cual vino a contarnos su vida, ya que fue ayudado por la Fundación tras haberse quedado arruinado de la noche a la mañana.
La labor de la Fundación Jesús Abandonado
El trabajador comenzó explicándonos cuál era la función de la Fundación y algunos talleres que ofrecen a las personas que acuden allí, para posteriormente dar paso al relato de Pencho y, finalmente, dejarnos un tiempo para que le hiciéramos preguntas.
Esta fundación, situada en la carretera de Santa Catalina, Murcia, se encarga de ayudar a las personas más necesitadas que acuden allí ya sea porque han perdido su trabajo, ya sea porque las hayan abandonado sus familias o porque se hayan quedado arruinadas debido a una drogodependencia; en general, personas en situación de exclusión social. Esta asociación no solo proporciona a estas personas las necesidades básicas a las cuáles una persona de esta época debe tener acceso, sino que les da compañía, lo cual es lo que más necesitan estas personas, porque tras haberse quedado en la calle nadie les ha ayudado y, en ocasiones, sus familias les han dado de lado.
Jesús Abandonado también realiza talleres de jardinería, de punto, de cerámica, así como de teatro. El trabajador social nos habló acerca de que la asociación estaba haciendo actuaciones de teatro a nivel nacional, ¡y el director de la compañía era Pencho! Tras esto, Pencho nos contó que estaba teniendo un gran éxito.
La caprichosa fortuna de Pencho
Dicho lo anterior, Pencho aprovechó el turno y nos habló sobre su vida. Nos contó que él tuvo una gran empresa en la que tenía una amplia plantilla de trabajadores y que de un día para otro su suerte cambió y se arruinó completamente. Como consecuencia, se vio en la calle y tuvo que pedir ayuda a Jesús Abandonado.
Terminado el relato sobre su vida, Pencho nos dejó cinco minutos para una ronda de preguntas en la que los alumnos fundamentalmente le preguntamos acerca de su vida personal, y respondió a todos con la misma amabilidad.
Y, para finalizar su visita, conforme íbamos saliendo, Pecho nos fue regalando a cada uno un marcapáginas realizado en uno de los talleres de manualidades de la Fundación Jesús Abandonado.
Pablo López Gil (4ºB ESO)