Los chicos del coro es una película que toda persona cinéfila o amante del arte en general debería ver, porque es eso, una obra de arte llevada a la gran pantalla. Este tipo de películas es muy recomendable para nuestros alumnos.
La televisión de hoy
Nuestra sociedad nos ofrece un altísimo porcentaje de basura espiritual, solo tenemos que echar un vistazo a nuestra “querida” televisión para darnos cuenta de que todo va muy rápido y sin rumbo; bueno,sí, lleva un rumbo que no interesa.
Por suerte, no tengo mucho tiempo para ver la TV, pero en alguna ocasión, echando un vistazo rápido, me encuentro con programas para “encontrar” el amor, donde van a buscar de todo menos eso, programas donde se critica y se difama a los demás, donde el grito y el insulto están a la orden del día. Programas donde cuanto más friki y ceporro seas más dinero ganas. En definitiva, la cultura del todo rápido y fácil. Podría poner muchos ejemplos pero creo que todos sabemos de lo que estoy hablando, me encuentro con una sociedad que nos vende la idea de que las cosas se pueden conseguir sin esfuerzo y esto es totalmente falso.
El cine y la música educan en valores
La razón de este primer pensamiento es clara: tenemos que educar en valores. Esta película para conseguirlo utiliza la música. ¿Cómo puede ser que la música pueda cambiar tus valores y la forma en la que ves la vida?
El argumento y la genialidad de este film se entenderá mejor si le dedico a su director un par de renglones.
Se llama Christophe Barratier, cuando era pequeño sus padres se divorciaron y lo metieron en un internado; además, se formó como guitarrista clásico en París. Ahora podemos entender mejor el tratamiento tan sublime que hace el director con esta película.
El diálogo educativo
La trama principal de la película nos muestra cómo un profesor en paro y músico fracasado consigue a través de la música y del “diálogo educativo” hacerse con un grupo de niños rebeldes de un internado, muchos de ellos huérfanos, a causa de la II Guerra Mundial.
La enseñanza juega un papel muy importante en la película, ya que nos muestra dos visiones de la enseñanza antagónicas. Mathieu representa el “dialogo educativo” y el director Rachin, quien gobierna el centro con estrictas reglas y castigos, utiliza la fuerza si es necesario. La autoridad se ve reflejada en el director Rachin, que se impone a través del miedo, y a quien los niños temen, pero no respetan.
La música es la protagonista de esta película, ya que a través de ella es como Mathieu consigue llegar a hacerse con el grupo de niños, motivándolos y consiguiendo que aprendan a expresar sentimientos que a veces con palabras no se pueden explicar.
Los temas más importantes de la película y sobre los que deberíamos cada uno reflexionar son: la infancia, la educación, la música, la autoridad, el éxito y el fracaso, las familias problemáticas, la delincuencia precoz, los malos tratos…
Como vemos, a pesar de ser una película ambientada unos años después de la II Guerra Mundial, trata temas de total actualidad.
«No cantan bien, pero cantan»
Me gustaría resaltar la figura del profesor Mathieu. A lo largo de la película utiliza una fantástica frase: “No cantan bien, pero cantan”. Nos está transmitiendo un mensaje esperanzador y una visión positiva de la vida. Todas las personas, sean como sean y vengan de donde vengan, se merecen el beneficio de la duda y apostar por ellas.
Mathieu cree en esos chavales y sabe que lo va a conseguir. Muchas veces hacer algo importante o no, depende de lo que nosotros mismos creamos, ese es el punto de partida, lo que nos va a permitir dejar el mundo mejor de lo que nos hemos encontrado.
El profesor, en este caso, utiliza el coro para transmitir la importancia del afán de superación y el trabajo en equipo.
Sin esfuerzo no se consigue nada valioso
Para no hacer muy larga esta entrada me voy a despedir ya, pero no sin antes mandar un mensaje a todos mis alumnos.
En nuestra sociedad actual estamos carentes de valores, moral e incluso de decencia, cada vez que pongo las noticias me llevo las manos a la cabeza. La gran mayoría se acomoda ante esta situación y se vuelve como lo que quieren que seamos. Otros dicen que no se puede hacer nada por cambiar. Yo os digo que empecéis por vosotros mismos y que trabajéis en todo aquello que dependa de vosotros, pero no un día, sino día tras día. La realidad es que sin esfuerzo no se consigue nada importante. Nadie dijo que iba a ser fácil…, ¡pero merece la pena!
D. Cárlos Vázquez, profesor de música